Nudo básico |
Nudo básico:
La manera más simple y práctica de usar tu bufanda con mucha energía. Sólo asegúrate de que sea una bufanda ancha y de un material muy delgado de manera que no se formen “burbujas” de tela que dificulten el trabajo de lucir fabulosa. Las dos tiras que cuelgan de tu cuello deben de lucir también siempre asimétricas de modo que tu atuendo luzca bastante informal.
Nudo corbata |
El nudo corbata:
Este es el típico nudo de invierno y puede cubrirnos perfectamente cada recoveco de cuello por donde se pueda filtrar el frío invierno. Para hacerlo, tensa tu bufando en dos secciones de igual largo, con la izquierda coge el medio de la bufanda y con la izquierda las dos puntas, pasa todo por detrás de tu cuello e introduce por el espacio que se formó en la mitad de la bufanda las dos secciones libre de la misma. Simple, ¿no?.
Sobre Cuello |
Solo debes usar este nudo cuando tu bufanda sea el tipico pañuelo 60’s de verano. Amortigua el look usando gafas de sol. Eso le dará un completo nuevo estilo. Recuerda, con bufandas largas ¡este nudo no va!
Sobre los hombros |
Sobre los hombros:
Para ocasiones muy formales, usa una pashmina ligera hecha de un material mucho más rico: seda, cashmere, etc. El truco es elegir una que recogida en nuestros hombros y codos tenga una caída muy buena y además roce el suelo cuando estemos con los zapatos con los que iremos al evento.
Este estilo está diseñado especialmente para las vanidosas. Esas chicas que aman tener un accesorio complementario al atuendo formal.
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